
Sustituye la sal en la mesa por una variedad de Especias naturales en tus comidas
Comer rico y sano, sin usar una pizca de sal, ¡es posible! Descubre este menú de ideas y llena tu mesa de sabores extraordinarios.
Aprende a utilizar distintas hierbas y especias, para crear platos ricos sin tener que recurrir a la sal para darle sabor.
Agrega ajo y cebolla frescos a cualquier comida. Puedes recurrir a sus versiones en polvo.
Un toque de salsa de soya puede proveerle un sabor interesante y salado a todo tipo de preparaciones, desde carnes, hasta vegetales.
Por supuesto, utiliza la versión reducida en sodio.
Para agregarle dulzura a tus comidas, exprime cítricos frescos sobre los vegetales.
Incorpora miel, azúcar integral o mermelada. En este caso, el objetivo no es reemplazar la sal, sino multiplicar el sabor para no sentir la necesidad de utilizarla.
Crea un delicioso condimento para rellenar tu salero. Mezcla dos cucharadas de pimienta negra, una de pimienta de Cayena, una de paprika, una de polvo de cebolla, una de polvo de ajo y una hoja de laurel molida.
Otro condimento que puedes preparar es una mezcla de albahaca seca, pimienta de Cayena, comino, ajo en polvo y cebolla en polvo.
El eneldo queda muy bien con las patatas, el pescado, el tomate y el ejote.
Con los últimos dos y con el pollo, también sabe fabuloso el orégano.
Romero y cordero, salvia con carne y patatas, y canela o nuez moscada con sopa, zanahoria y calabacín.
Para saborizar carnes, diviértete ensayando también con albahaca, laurel, curry, comino, mostaza seca, ajo, jalea de uva, pimienta verde, hongos frescos, nuez moscada y perejil.
En el caso de los vegetales, puedes intensificar su gusto con albahaca, eneldo, ajo y cebolla , jengibre, jugo de limón, nuez moscada, estragón, azúcar, vinagre o aderezo de ensalada sin sal.
Disminuye lentamente la cantidad de sal que utilizas al cocinar y en la mesa, hasta que ya no te haga falta recurrir a ella. Tampoco la agregues al agua de la cocción del arroz y los vegetales.
Compra hierbas y especias en pequeñas cantidades, en lugar de almacenarlas por un largo tiempo.
Si vas a usar perejil o cilantro fresco, ponlo en remojo antes de usarlo.
Si agregas las especias antes de cocinar, frótalas o aplástalas para que suelten más sabor y aroma.
Un truco más, usa las especias después de cocinar, cuando los platos ya están listos, sacarás mejor provecho de su exquisito sabor.
Recuerda consultar a un experto en salud antes de implementar cambios en tu alimentación.